El ZUCCHINI, llamado también calabacín o zapallito, es una hortaliza de fruto, firme y carnoso, de forma alargada y cilíndrica, semejante al pepino cohombro y de tamaño y colores variados.
Esta hortaliza de fruto pertenece a la familia de las Cucurbitáceas, como lo son también las sandías o patillas y melones. Así como las calabazas y pepinos.
Al madurar se torna un poco blanco.
Se utiliza mucho en la cocina oriental y se consume cuando está tierno, salteado (en poca grasa) en un Wok. También crudo en ensaladas.
Es rico en minerales (hierro, magnesio, potasio, calcio, zinc, yodo, fósforo, sodio y otros más. Y vitaminas B1, B2, B3, B6, B9 (ácido fólico), C, A y carotenoides.
El origen del zucchini es incierto podría ser de América o Asia, pero es verdad que en la actualidad el cultivo y consumo del zuchini está extendido por todo el mundo.
Podemos encontrar muchas variedades distintas de calabacines. En el verano es cuando se disfrutan más porque son muy frescos al paladar. Sus flores también son comestibles y las podemos añadir a ensaladas y como adorno (arte culinario) de los platos que más nos gusten.
Compra:
La frescura se ve en su textura que debe ser firme y su corteza o piel densa (al golpear se escucha un golpe seco) y lisa, no con partes blandas y sin defectos de crecimiento.
Los frutos de calidad de una variedad determinada, deben tener sus líneas bien definidas y sus ángulos bien marcados.
En cada fruto debe haber un tallo de 4-5 centímetros de largo y un corte bien definido para garantizar una excelente pulpa.
Aunque los frutos no estén totalmente maduros, pueden continuar su maduración después de recolectados.
Su color puede ser verde, amarillo, jaspeado verde y blanco (cebra) o verde claro y verde oscuro.
CLASES DE ZUCCHINI O CALABACÍN.
ZUCCHINI CEBRA.
El Zucchini o calabacín Cebra recibió su nombre debido a la tonalidad de la fruta y decorado con rayas longitudinales de colores verde claro y oscuro y verde oscuro y blancos.
No todas las variedades de calabacín se pueden almacenar a largo plazo.
Estas variedades si:
ZUCCHINI O CALABACÍN AERONAUTA.
De origen ruso.
Esta hortaliza madura muy temprano.
De forma cilíndrica y su fruto comienza a salir entre los 46–48 días después de aparecer los nuevos retoños. Pueden alcanzar un peso de 1,5 kg, y su duración es más o menos hasta los 4 meses.
Su pulpa es firme y aromática.
Crece tanto en invernadero como en sitios abiertos (a la intemperie). Se puede industrializar y cultivar en casa.
ZUCCHINI AMARILLO
Los Zucchinis o calabacines amarillos son cilíndricos y pesan entre 900 gr.- 1000 gr. cada uno. Ricos en nutrientes como la queratina, que permanecen en el interior del vegetal aproximadamente durante 3 meses.
ZUCCHINI NEGRO.
El zucchini o calabacín NEGRO, es de más bien de color verde oscuro, forma alargada y pulpa tierna y deliciosa.
El cultivo cosechado puede permanecer en el sitio escogido hasta por 2 meses o más, teniendo en cuenta las normas adecuadas para su almacenamiento.
ZUCCHINI PRESENTADORA.
EL PRESENTADORA, es una variedad de maduración temprana, frutos de forma cilíndrica.
Estos frutos se caracterizan por tener una pulpa de color amarillo claro. Después de cosecharlos, se puede almacenar aproximadamente por mes y medio o 2 meses.
También existen otras variedades no menos importantes como lo son: Festival, Gribovsky y Golden Cup.
Para encurtidos y conservas las variedades: Zolotinka, Genovese, Skvorushka y Tsukesha, son especiales porque se caracterizan por su dulzura.
Almacenamiento y conservación del zucchini fresco.
Si se han plantado zucchinis en el patio trasero de la casa, estos calabacines frescos y recién recolectados, no se pueden lavar, ya que los frutos se podrían descomponer. Más bien se han de limpiar con paño seco y limpio y colocar en un lugar ventilado para que se sequen pues tienen exceso de humedad.
Al refrigerar, se colocan en el cajón de los vegetales de la nevera con la rejilla de este abierta y sin bolsa de plástico.
Si ha quedado un trozo, colocar en el refrigerador en un recipiente con tapa preferiblemente de plástico. Conservarlo con cáscara boca abajo (para que su misma humedad no lo dañe).
Duración:
8 – 10 días siguiendo los consejos dados y dependiendo de su frescura al momento de la compra.
ALMACENAMIENTO, REGLAS GENERALES.
Una vez elegido el sitio para el almacenamiento de los frutos, hay una serie de reglas generales que se han de tener en cuenta para evitar que la vida útil de los zucchinis sea más corta.
Se ha de considerar lo siguiente:
- Almacenar frutos limpios y secos, sin signos de descomposición. Los zucchinis o calabacines, deben almacenarse desempacados, con acceso de aire constante.
- Por ningún motivo se pueden colocar dentro de bolsas de plástico, ya que sudan y esta humedad los pudre.
- La temperatura favorable para su almacenamiento está entre los +4 … + 10 ° C, aunque los frutos se pueden almacenar a temperatura ambiente (+18 … + 23 ° C) pero por corto tiempo.
Si la cosecha se va a almacenar de preferencia ha de ser en contenedores de madera (huacales o paletas).
Se puede evitar su descomposición, aplicando en su la cola papel de aluminio o cera. ya que es por este punto donde comienza a dañarse y esto se extiende por todo el vegetal.
O colocar en el refrigerador como ya se indicó antes.
- Siempre se ha de estar revisando el estado de los frutos para detectar a tiempo uno en mal estado, ya que este lo más probable es que dañe otros. Los enteros y firmes se pueden colocar en un espacio seco y limpio con aserrín seco.
- El almacenamiento del zucchini ya sea fresco o en conserva, se puede hacer tanto a temperatura ambiente como refrigerado o congelado.
A temperatura ambiente:
Lo ideal para los zucchinis o calabacines sería una despensa con estantes en un sótano o bodega con una temperatura de
+2 a + 10 ° C
Para controlar y regular estos indicadores, se puede colocar un termómetro dentro del lugar.
Antes de almacenarlos, hay que asegúrese que no haya plagas como cucarachas, roedores, entre otros ya que dañan y contaminan los frutos que y no serán aptos para el consumo.
También se ha de prevenir el moho en estos sitios. El heno colocado en los estantes o el papel encerado esparcido, ayudan a reducir la humedad y evitan que los frutos se pudran.
Si no se cuenta con un sótano, los vegetales conservarán muy bien sus propiedades dentro de la casa o departamento. Lo importante es que el lugar elegido sea fresco (donde esté ventilado), seco y que no le den los rayos del sol directamente y que esté alejado de aparatos (calefacción) o electrodomésticos que produzcan calor (motores, estufas o fogones).
En el refrigerador:
Estos vegetales se pueden almacenar en el refrigerador cuando son unos cuantos. Para organizar reservas frescas para todo el invierno, la capacidad del refrigerador no es suficiente.
El proceso de colocación de vegetales en este caso implica los siguientes pasos secuenciales: Limpieza de frutas de la suciedad (limpie primero con un paño húmedo y luego con un paño seco). Colocar el zucchini en un recipiente preferiblemente de plástico, sin tapa y con papel absorvente de cocina en el fondo y colocar en el cajón de los vegetales o en la parte baja del refrigerador. No olvide inspeccionar periódicamente las verduras, porque incluso en tales condiciones pueden deteriorarse. Con la detección oportuna de un espécimen en descomposición, el resto de las frutas se pueden salvar.
En el congelador.
Para congelar se recomienda el fruto licuado o triturado. Se coloca el contenido en bolsa plástica resellable (con cierre) y se aplana para que ocupe menos espacio en el congelador y para que se pueda descongelar rápidamente.
El método de corte depende de la futura preparación:
Ejemplo, para preparar un guiso, se pueden cortar los frutos en cubos y, para freírlas después de descongelarlas, es mejor cortarlas en círculos o rodajas.
Los calabacines se limpian de la suciedad (se les puede retirar la corteza o piel), luego se colocan en una bandeja sin poner unos encima de otros y se llevan al congelador. Al cabo de 2 o 3 horas de congelamiento, el contenido se embolsa por porciones (lo que se necesite para cada preparación), y se almacenan para disfrutarlos durante el invierno.
Su tiempo de duración en el congelador es de aproximadamente de 3 meses para que el vegetal no se torne amargo.
A medida que transcurre el tiempo, la piel del vegetal se vuelve gruesa, se endurece y su pulpa se vuelve blanda y amarga y las semillas comenzarán a germinar. Razones por las que hay que consumir estos frutos mientras estén jugosos y dulces, aún sin esperar a la fecha límite de vencimiento.
Usos:
Los zucchinis salteados en un wok se usan en las preparaciones orientales.
En conserva agri-dulce se puede adicionar a ensaladas de vegetales. También se pueden usar como ingrediente para bocadillos dulces o colocar en hamburguesas lo que hace que estos frutos sean muy versátiles en sus usos y preparaciones.
Los vegetales preparados, procesados o en conserva al envasarlos se deben marcar con fecha de envase y fecha de vencimiento y colocar en la despensa después de enfriar y sellarlos al vacío. Al destaparlos se deben refrigerar.
Las verduras más tiernas y deliciosas serán las frutas de no más de 12 días. Su carne es tan tierna y jugosa que además de hornearse o hervirse en una cacerola, también se pueden comer crudas, agregándolas a ensaladas frescas. Los frutos jóvenes y demasiado maduros cuya pulpa esté blanda son especiales para hacer puré o congelarlos después de procesarlos en un procesador de alimentos y adicionarles aceite de oliva ya sean crudos o salteado en este. También se pueden hornear, hervir o freír sin quitar la piel.
En los lugares de estaciones, al llegar la primavera, es delicioso comer los frutos que queden en el almacenamiento, peladas y ralladas para disfrutar su frescura en ensaladas.
Se pueden usar los vegetales cosechados de la misma manera que las recién cortadas del jardín. Para frutas maduras con pieles gruesas, se requiere este procedimiento, de lo contrario, el sabor del plato terminado no será tan suave.
Los frutos viejos y blandos no son muy adecuadas para la conservación como las recién cosechadas, por lo que vale la pena hacer preparaciones solo con vegetales que se hayan almacenado durante no más de 1 a 2 semanas.
Para descongelar los zucchinis o calabacines se sacan del congelador y se colocan en la parte inferior del refrigerador ó a temperatura ambiente sobre el mesón (mesada) de la cocina. Su textura y sabor varían considerablemente después de congelados.
