Compra:
El ATÚN, es un pez de agua salada. Tamaño grande, pesa entre 150 a 700 kg. Se encuentra principalmente en el Mediterráneo.
Frescura de Atún:
Su carne es rojiza laminada, de difícil digestión pero muy nutritiva y deliciosa.
Sus presentaciones en el mercado: Fresco, refrigerado y congelado. En conserva solo o con verduras (enlatado o envasado) en aceite o en agua. (Ver atún en conserva).
El pescado se debe comprar al final del mercado, para que no se interrumpa la “cadena de frío” del producto y al llegar a su destino final, colocarlo de inmediato en la nevera, ya sea a congelar o a refrigerar si se va a consumir máximo al otro día.
Usos:
Fresco, se puede preparar a la sartén, en salsa o frito.
Almacenamiento del Atún:
Fresco y congelado, 4 meses aproximadamente. Para descongelarlo, pasarlo del congelador al refrigerador con tiempo para que se efectúe el proceso.
Hay que tener en cuenta el evitar la “contaminación cruzada”, es decir, al almacenar un filete cocido no debe estar cerca de uno crudo.
El pescado o cualquier otra carne se deben de pasar del congelador al refrigerador para ser descongelados, nunca descongelar a temperatura ambiente.
Fresco refrigerado y condimentado, 2 días máximo.
Su duración también depende de su fecha de vencimiento (ver empaque) y de su conservación adecuada y manipulación con utensilios y manos limpios.
Al descongelar, pasar al refrigerador. Nunca descongelar a temperatura ambiente. Una vez descongelado, no volver a congelar, porque se activan los microorganismos y se puede volver nocivo para la salud.
Conservación:
Congelar. Refrigerar.
Duración:
4 meses aprox. 2 días aprox.
Nota:
El pescado o cualquier otro alimento, se debe manipular con manos y utensilios limpios.