
El CORZO, es un animal de caza de pelo mayor. Los animales entre 1 y 3 años proveen la mejor carne, ya que entre más años se vuelve más dura.
Su edad se conoce por en número de mogotes que tiene en los cuernos.
Frescura del CORZO:
La carne de primera categoría, son los perniles, lomo, carré (costillar deshuesado, lomo ancho), barón (las dos piernas traseras y la silla), silla (cadera), que se preparan asados.

Carne de segunda categoría son la espaldilla (paletilla), pecho y cuello, que se utilizan para preparar estofados y encebollados. Antes de prepararlos se deben adobar o marinar con una mezcla de vino, vinagre, zanahorias y cebollas, para enternecer la carne y suavizar su sabor.
Usos:
Se prepara asado, estofado, en salsas.
Almacenamiento del CORZO:
Todo carne de animal de caza, se debe conservar en neveras portátiles mientras se llega a su destino final. Se lava, se marina y se pone madurar en frío por dos días para que se ponga tierna y suave. Luego se congela la que no se va a consumir pronto.
Su duración refrigerada, 2 días. Congelada, 2 meses aproximadamente y dependiendo de la cantidad de materia grasa que contenga.
Conservación del CORZO:
Congelar. Refrigerar.
Duración:
2 meses aprox. 2 días.
Nota: ¡Peligro!
Es de vital importancia contar con la información sobre los peligros de la carne de caza, cuando se emplean municiones a base de plomo, debido al riesgo de contaminación que sufre la carne al entrar este en contacto dentro de ella.
Se debe tener conocimiento sobre el plomo, que al ser un metal que al consumirlo el ser humano, disminuye el coeficiente intelectual y el desarrollo cognitivo (menor capacidad del cerebro para procesar la información). Ésta enfermedad se conoce con los nombres de “Plumbismo”o “Saturninismo“, porque los Alquimistas llamaban a este elemento, Saturno.
Los niños menores de 6 años, mujeres embarazadas o que estén intentando tener hijos, no pueden comer carne de animales cazados con munición de plomo porque es aún más tóxico para cerebros en formación y que se estén desarrollando, que en los cerebros ya maduros.
Por tanto se deben tomar precauciones, con la carne cazada con este tipo de munición, aún para las personas que no se encuentran dentro de los parámetros ya mencionados. Hay que recortar y desechar el trozo de carne que esté dañado por la munición y la zona situada alrededor de la herida visible.
